La sensibilidad o hipersensibilidad dental es una de las dolencias en la boca más comunes en los adultos y puede llegar a ser muy molesta haciendo incluso que temamos comer ciertos alimentos o beber ciertas bebidas para evitarla. En el artículo de hoy queremos hablar de cómo hacer para no tener sensibilidad en los dientes y decir adiós a la sensibilidad dental. ¡Y recuerda que nuestro equipo de endodoncistas en Terrassa está a tu disposición para cualquier cosa que necesites! Tan solo tienes que contactarnos.
Antes de explicar por qué aparece la sensibilidad dental, queremos explicarte qué es exactamente.
La sensibilidad en los dientes es un dolor intenso pero momentáneo en respuesta al frío, calor e inclusive al tacto en los dientes y encías. Este dolor ocurre cuando la parte interna del diente (dentina) queda expuesta a estímulos térmicos, evaporativos, táctiles o químicos.
La dentina se encuentra bajo el esmalte del diente y la encía, es decir que, cuando hay un gran desgaste y ésta se queda sin protección, es cuando ocurren los dientes sensibles. Es un dolor que es pasajero normalmente. Pero, por este mismo motivo, a pesar de ser el dolor más común a nivel bucal, es el menos tratado. Lo idóneo es que si se tienen síntomas de sensibilidad en los dientes, acudir al dentista para detener o minimizar los efectos de desgaste y evitar problemas mayores además de no tener sensibilidad en los dientes.
Cómo hemos visto, los dientes sensibles son la consecuencia de tener la dentina expuesta a factores exteriores debido al desgaste del esmalte dental. El esmalte dental que protege la dentina es la capa más superficial del diente. Si este se debilita y tiene fisuras, deja expuesta a la dentina, que es un área sensible de los dientes. Ésta se encuentra justo encima de las terminaciones nerviosas y estas reaccionan cada vez que perciben estímulos externos causando dolor.
Las principales causas de desgaste del esmalte son las siguientes:
Lo más importante a la hora de sufrir sensibilidad dental, es acudir al dentista, averiguar las causas y seguir las instrucciones del profesional para poder mejorar y no tener sensibilidad en los dientes.
Hay que tener en cuenta que para poder tratar la sensibilidad dental se deberá de tener una buena higiene oral. Eso implica cepillarse los dientes de la manera correcta, al menos, 2 veces al día durante 2 minutos, utilizar el hilo dental y el enjuague bucal a diario y cepillarse la lengua con las herramientas correctas. Es conveniente utilizar un cepillo de dientes con cerdas suaves y cepillar los dientes realizando movimientos suaves y circulares desde el diente hasta la encía repetidas veces. Es importante también utilizar una pasta de dientes que contenga flúor y que esté indicada para reparar el esmalte dental o para dientes sensibles. El enjuague bucal que se debe utilizar debe ser uno adecuado para dientes sensibles ya que, si se utiliza uno cualquiera, puede tener un efecto contrario al deseado. En cualquier caso, es conveniente consultar al dentista y que sea éste con conocimiento de causa que te indique qué productos son los más indicados para tu caso en concreto.
Asimismo, para no tener sensibilidad en los dientes, es conveniente cambiar algunos hábitos alimenticios para cuidar más los dientes. Por ejemplo, hay que evitar el consumo de bebidas y comidas ácidas que puedan desgastar el esmalte cómo los cítricos, el vino, el vinagre, las bebidas carbonatadas, los zumos azucarados, etc. También hay que evitar las comidas y bebidas ultraprocesadas y con mucho azúcar para proteger los dientes.
Además de los hábitos alimenticios, también hay que cambiar ciertos hábitos de vida para proteger y cuidar nuestro esmalte dental, como por ejemplo el tabaco. Es importante reducir al máximo o eliminar el consumo de tabaco o de alcohol para poder tener una salud bucal óptima.
Existen pastas de dientes que a través de los ingredientes específicos que incorporan eliminan la sensación que provoca el estímulo del dolor en los nervios dentales. No obstante, estas pastas de dientes siempre deberán ser prescritas por un profesional.
Otro remedio contra la sensibilidad dental es la aplicación de flúor en la zona para fortalecer el esmalte y reducir el dolor.
En algunas ocasiones el odontólogo recurre a la aplicación de resina restaurativa sobre la superficie donde la raíz del diente está expuesta. Este tratamiento suele requerir anestesia local.
La sensibilidad dental también puede tratarse con un injerto quirúrgico de las encías. Si la raíz ha perdido encía, se puede extraer de un lugar de la boca que sobre para reubicarlo en el diente que sufra sensibilidad.
El tratamiento de conducto o endodoncia es otro de los remedios más efectivos para combatir la sensibilidad dental. De esta manera, se actúa sobre la pulpa del diente, sobre el nervio y se elimina su sensibilidad para evitar el dolor. Pese a que ésta suele ser siempre la última opción.
En Clínica Dental de Terrassa estamos a tu disposición para lo que necesites. Ponte en contacto con nosotros y solicita una primera cita totalmente gratuita. Revisaremos el estado de tu boca y te asesoraremos sobre qué debes hacer para resolver tu problema.