Es posible que no hayas oído hablar de la microflora oral, pero es importante que sepas que cumple una función muy importante en nuestra salud bucodental. Es por eso que, en este artículo, queremos contarte todo sobre sus desequilibrios.
La microflora oral es la comunidad de microorganismos que habita en la boca y forma parte del ecosistema oral. Está compuesta por una amplia variedad de bacterias, hongos, virus y otros microorganismos que coexisten en la cavidad oral en equilibrio.
Esta microflora desempeña un papel crucial en la salud bucal, ya que ayuda a mantener el equilibrio del ecosistema oral y contribuye al mantenimiento de la salud de los tejidos orales. Sin embargo, cuando este equilibrio se ve alterado, pueden surgir problemas de salud bucal, como caries, enfermedades periodontales e infecciones bucales.
La composición de esta microflora varía de una persona a otra y puede influenciarse por diversos factores. Cualquier desequilibrio en la microflora oral tendrá un impacto significativo en la salud bucal, generando lesiones y patologías. Además, es importante recordar que el desequilibrio del ecosistema oral no solo puede afectar la salud bucal, sino que también se ha asociado con enfermedades sistémicas, como enfermedades cardiovasculares, diabetes, Alzheimer y neumonía nosocomial ya que el cuerpo es un todo y lo que pasa en una parte del cuerpo afecta a toda la salud en general.
No hay una sola causa en concreto que puede generar un desequilibrio, sino que existen varias causas que pueden llevar a desequilibrios en la microflora oral.
Una higiene deficiente, como no cepillarse los dientes un mínimo de 2 veces al día y de la manera adecuada, no usar hilo dental a diario o no realizar enjuagues bucales, permite la acumulación de placa bacteriana y la proliferación de bacterias perjudiciales.
La poca producción de saliva provoca que la flora bucal se desequilibre y aparezcan bacterias más patógenas. Esto favorece que aparezcan más lesiones en la boca como llagas, caries, problemas de encías o lesiones en las mucosas. La poca salivación y los problemas derivados de ésta, también pueden facilitar que se den problemas digestivos.
Cuando respiramos por la boca el aire no pasa el proceso de filtrado que tiene cuando pasa por la nariz. Esto provoca que la boca se seque y favorece el desequilibrio de la flora bacteriana puesto que las bacterias ideales para nuestra salud no se sienten cómodas en este espacio tan seco.
Una dieta rica en azúcares y carbohidratos refinados proporcionará un entorno propicio para el crecimiento de bacterias cariogénicas, lo que puede conducir a la formación de caries dental. Asimismo, una alimentación desequilibrada puede afectar a la composición de nuestro ecosistema oral.
Los antibióticos pueden alterar el equilibrio de la microflora oral al eliminar bacterias tanto beneficiosas como perjudiciales. Esto puede permitir que las bacterias patógenas se multipliquen sin control y aumenten el riesgo de infecciones orales.
El estrés puede tener un impacto negativo en la microbiota oral. El aumento de los niveles de estrés puede alterar el equilibrio de las bacterias en la boca, lo que puede aumentar el riesgo de enfermedades bucales como la gingivitis y la periodontitis.
Los desequilibrios en la microflora oral suelen estar asociados con varios problemas y patologías bucales. A continuación vamos a ver las más comunes.
La caries dental es una enfermedad causada por la desmineralización de los tejidos duros de los dientes debido a la actividad de las bacterias presentes en la placa dental. Algunas bacterias cariogénicas pueden metabolizar los azúcares y producir ácidos que dañan el esmalte dental. Si la microbiota oral contiene un mayor número de estas bacterias dañinas en comparación con las bacterias beneficiosas, el riesgo de desarrollar caries aumenta. Las caries se producen cuando hay una mala (o nula) rutina de higiene bucodental.
Las enfermedades periodontales son causadas por una respuesta inflamatoria crónica a la acumulación de placa bacteriana en las encías. Las bacterias periodontopatógenas pueden colonizar las bolsas periodontales y desencadenar una respuesta inflamatoria destructiva, lo que lleva a la pérdida de tejido gingival y, en casos graves, a la pérdida de soporte óseo alrededor de los dientes.
El mal aliento puede ser causado por la producción de compuestos volátiles de azufre por parte de ciertas bacterias presentes en la boca. Cuando la microflora oral está desequilibrada, con un aumento en las bacterias productoras de compuestos volátiles de azufre, puede provocar un olor desagradable en el aliento, provocando halitosis.
Una microbiota oral desequilibrada puede contribuir a la sensibilidad dental. El daño al esmalte dental y la exposición de la dentina pueden ocurrir debido a la presencia de ciertas bacterias y ácidos, lo que aumenta la sensibilidad dental a estímulos como el frío o el calor.
Para restaurar el equilibrio de la microflora oral, es importante mantener una buena higiene bucal, visitar regularmente al dentista, llevar una dieta sana y equilibrada, evitar el consumo de tabaco y alcohol, considerar el uso de probióticos orales y controlar el estrés. Asimismo, también es importante imitar el uso excesivo de antibióticos y seguir las recomendaciones de tu dentista.
En Clínica Dental de Terrassa contamos con protocolos y tratamientos muy efectivos para poder solucionar este problema de forma sencilla y cómoda para nuestros pacientes.